Las medias son esa prenda que toda mujer tiene en su armario, por muy poco uso que haga de ellas. Como norma general, estas quedan siempre relegadas a los looks de otoño, los modelos más gruesos en invierno y parte de la primavera en su versión más colorida. Pero lo cierto es que no se buscan ser la pieza recurrente de un vestuario más tapado, sino que también quiere posicionarse como favorita en verano.
No solo aportan un toque extra al look que se lleva, sino que se estilizan las piernas, sobre todo en verano que es cuando más se muestran. Además, también broncean y a la vez protegen de sufrir quemaduras, ya que el color adecuado da un tono más a la piel y el sol no incide tanto en ella respectivamente.
¿Qué medias hay que llevar?
En verano se deben llevar otra clase de medias, ya que las que se utilizan en las etapas más frías del año no valdrían. Esto ocurre porque no contienen las mismas fibras ni el grosor que las piernas necesitan en cada momento. Lo que sí tienen en común todas las medias es que estilizan y mantienen recogidas las extremidades, favoreciendo el movimiento sin afectar a la circulación de estas.
A la hora de escoger las medias para utilizar en verano es aconsejable seleccionar unas con un tono más, para dar color a las piernas, y nunca demasiado claras o muy oscuras, ya que se notaría y el resultado sería un tanto desastroso. Lo mejor es decantarse por unas transparentes, que se adecúen al propio tono de piel, aunque se puede forzar un poco si se pone medio tono más al propio, para que no quede tan apagado y dé la sensación de piernas bronceadas.
El color queda reservado para un look de noche, ya que por el día tenderían a dar más calor. Lo mejor es no escoger nunca unas con acabado brillante, ya que en verano se debe disimular que se están luciendo medias. Las mejores para verano son las que cuentan con un toque mate, ya que darán una sensación de segunda piel, siempre y cuando la calidad sea la adecuada. Es importante también asegurarse de que las medias que se escogen tienen un sistema antiroturas o que por lo menos no dejan marca al romperse.
Por otro lado, lo importante también es el resto del conjunto, por lo que no se deben llevar medias si lo que se van a calzar con sandalias o cualquier tipo de zapato que deje los dedos al aire. Lo mejor son unos mocasines o unas alpargatas tan típicas de las zonas mediterráneas y que tan de moda están.
Modelos adaptados a las necesidades particulares
Para verano se puede encontrar toda una amplia gama de medias, aunque al principio no pudiera parecerlo.
Medias completas
Las medias completas son las que van desde la cintura hasta los dedos de los pies. Estas deben llevarse con calzado cerrado para que no se note a la hora de llevar unas sandalias o cualquier otro calzado abierto.
Medias con aberturas
Existe también un modelo especial de este tipo de medias son las que tienen en los extremos donde la costura queda abierta en la zona de los dedos. Para que no se vayan subiendo conforme al movimiento, estos tienen una goma adaptable al dedo gordo del pie. De esta manera se puede llevar ciertos zapatos abiertos con los dedos al aire.
Medias reductoras
Las últimas serían las reductoras o de control. Estas son la tercera clase de medias que se pueden encontrar para la época estival. Son elásticas y muy finas, además de tener color carne en distintas tonalidades para que se noten todavía menos. Estas se adaptan a la cintura y terminan a mitad del muslo, lo que permite estilizar la zona cubierta que dejan los vestidos o faldas midi.