Se convirtió en la anécdota por excelencia de la entrega de los Premios del Sindicato de Actores 2013, algo que no le ha sentado nada bien a la casa Christian Dior. Cuando Jennifer Lawrence fue galardonada con el premio a Mejor Actriz por su papel en 'El lado bueno de las cosas', sufrió un percance con su vestido al subir al escenario.
Se pilló la cola de su modelo azul oscuro de Dior -marca de la que es imagen- con la pata de la silla, de tal manera que una de las capas se descolgó del resto del vestido de corte sirena y tuvo que arreglarlo como pudo para poder continuar su paseíllo hasta el escenario.
Ahora, después de que la anécdota recorriera medio mundo, la firma de moda ha emitido un comunicado para aclarar lo sucedido, asegurando que el vestido no se rompió, simplemente una de las capas se desprendió del resto.
"El vestido está hecho con diferentes capas de tul y satén, y eso es lo que los espectadores vieron cuando Jennifer se levantó el vestido ligeramente. No fue arrancado ni tampoco falló el diseño", ha explicado Dior en el escrito difundido.