El vestido de novia de Catherine Middleton se expone en el Palacio de Buckingham

La llegada del verano a Londres implica la apertura al público del Palacio de Buckingham, que entre agosto y septiembre muestra algunas de sus principales salas así como parte de los tesoros que atesoran sus paredes. Los visitantes que se pasen por el lugar tendrán una sorpresa muy especial, y es que el vestido de novia de Catherine Middleton formará parte de los objetos expuestos esta temporada.

El traje diseñado por Sarah Burton será el centro de atención en una de las salas bajo una tenue luz que convierta en protagonistas los encajes ideados por la mente creativa tras la marca Alexander McQueen. El vestido, en color marfil y con escote corazón, estará acompañado por los zapatos y joyas que lució la Duquesa de Cambridge el pasado 29 de abril. Entre los objetos destaca la tiara Halo de Cartier, regalo del Duque de York a la Reina de Inglaterra en 1936.

El Palacio de Buckingham también presentará al público una réplica del pastel de boda que degustaron los invitados a la boda real. La repostera Fiona Cairns fue la encargada de crear tan exclusivo postre.

Catherine Middleton conquista América

El príncipe Guillermo y su esposa han estado durante las últimas semanas de viaje oficial al otro lado del charco, visitando Estados Unidos y Canadá. Middleton ha conquistado América con su simpatía y unos cuidados looks acordes con todos los eventos a los que acudía.

Catalina de Cambridge fue una cowboy más en Calgary, con vaqueros, camisa a cuadros y el característico sombrero vaquero; y los canadienses se rindieron a sus pies cuando en uno de los actos lució la hoja de arce simbólica del país en uno de sus sombreros.

La pareja visitó Los Ángeles, convirtiéndose en auténticas estrellas de Hollywood. Allí los vestidos de cóctel fueron los protagonistas, tanto en colores vivos como con discretos estampados florales. En la fiesta 'BAFTA Brits to Watch' se codearon con estrellas de la talla de Jennifer Lopez y Middleton mostró su buen gusto con vaporoso diseño lila de Alexander McQueen que marcaba su silueta con un cinturón blanco de pedrería.